Realmente…. ¿Queremos que la Prevención avance?
Realmente…. ¿Queremos que la Prevención avance?
Hace unas semanas, por fin, pudimos tener conocimiento sobre las posibles propuestas de modificación del INSST-DGT, para la LPRL y el RSP, entiendo que con el claro fin de que la prevención avance.
Sensación agridulce: donde no se han tenido en cuenta ni a los profesionales, ni a las Asociaciones expertas en la materia.
Después de varias lecturas y de una reflexión creo que sosegada, me he quedado con una sensación agridulce. Primero, porque no han tenido en cuenta a las asociaciones de profesionales como AEPSAL u otras, que tenemos un único fin, el avance de la prevención con MAYÚSCULAS, sin colores e influencias políticas. Segundo, porque son propuestas que tienen lo que yo llamo el SÍNDROME DEL CONGRESO, buenas palabras, alguna idea brillante pero generalmente con una complicada aplicación práctica en el día a día de los TPRL; un exo-esqueleto es un gran invento, pero no todos los puestos de trabajo industriales requieren uno y no es la solución para toda la problemática preventiva en la industria, además solo un porcentaje de empresas se lo puede permitir.
Hay un tercer punto que no se trata y que los profesionales creemos que fomentaría el avance del sector y por ende del nivel preventivo de las empresas, que sería la liberalización de la profesión del TPRL.
Necesitamos un avance de la Prevención sin colores, ni influencias políticas
Las anteriores reflexiones pueden parecer severas, seguramente más de un lector, dada la sociedad polarizada en la que nos encontramos, dirá que mis apreciaciones estarán influidas por mi pertenencia a alguna tendencia política y que por eso no estoy conforme; pues nada más lejos de la realidad y para justificarme os lanzo estos dos ejemplos:
- Se contempla en la propuesta, la posibilidad de que la formación en prevención pueda impartirse con medios propios de la empresa o por entidades especializadas que no sean servicios de prevención, lo que modificará los art. 15.2 y 19 de la LPRL.
Bajo mi punto de vista, esta propuesta tiene una parte positiva, al abrir la formación en PRL a otros departamentos de la empresa que no sean el SP. Se fomenta la integración de esta y además, más de un trabajador lo agradecerá, ya que habrá soportado en algún momento cursos diseñados para impartirse de igual forma en una peluquería que en una fundición. No obstante, también tienen una parte negativa, se puede perder la sensibilidad preventiva en las formaciones, ya que profesionales muy cualificados en un oficio, pueden tener practicas no totalmente seguras de trabajo, que se deberán depurar; además se puede abrir la influencia de las urgencias productivas en la formación.
- Por otro lado, se propone disgregar la disciplina de “ERGONOMÍA Y PSICOCIOLOGÍA”, en dos independientes, modificando lo art. 20 y 34 del RSP.
Bajo mi punto de vista, este no es el problema de esta especialidad preventiva, que está afectada por un problema estructural de la sociedad y el sistema. No parece coherente, que dentro de los temarios cursado por los ingenieros (industriales, aeronáuticos, etc.…), no se traten con profundidad, temas preventivos y en especial ergonómicos, hecho que dificulta la prevención en diseño y produce que los medios de producción puedan ser los causantes de las lesiones de los trabajadores. Por otro lado, la psicosociología no se desarrolla dentro de las empresas, en la mayoría de los casos, no por falta de conocimiento de los profesionales, sino por miedo en las empresas a abrir un “melón” que le puede producir un tsunami social, en la que el empresario no ve ningún beneficio.
Por todo esto os lanzo mi pregunta: ¿QUEREMOS QUE LA PREVENCIÓN AVANCE?
AUTOR: Emiliano Agudo Benito.
Gestor de PRL y miembro de AEPSAL.