Tiempos modernos(1936)
Tiempos modernos (1936), dirigida y protagonizada por Charles Chaplin, es una obra maestra del cine que ofrece una crítica mordaz a las condiciones laborales durante la era industrial. A través de su característico humor, Chaplin expone los riesgos asociados a la mecanización y la falta de medidas de seguridad en el trabajo.
La película sigue al icónico personaje de Chaplin, un obrero que lucha por adaptarse a la implacable rutina de una línea de producción automatizada. Las escenas muestran cómo la presión constante y la repetitividad de las tareas afectan su salud mental y física, reflejando el estrés laboral y la deshumanización que enfrentaban muchos trabajadores en ese período.
Chaplin también aborda la alienación del trabajador, representando cómo los empleados eran tratados como meros engranajes en la maquinaria industrial, sin consideración por su bienestar. La película destaca la falta de autonomía y el control estricto de los superiores, elementos que contribuyen a un ambiente laboral opresivo y peligroso