El teletrabajo, solución ante la emergencia COVID o mejora organizacional. ¿Cómo gestionamos sus riesgos?
El confinamiento por COVID-19 ha propiciado la necesidad de convertir, en muchas ocasiones, rincones de nuestra casa como espacios de trabajo, de una forma urgente. Una situación nueva para la que no todas las empresas estaban preparadas a nivel organizativo, y que tras dos meses de proclamación del estado de alarma sigue siendo la forma de trabajo preferente.
Una situación que se alargará en el tiempo (en principio dos meses tras final del estado de alarma pero que en muchas organizaciones “ha venido para quedarse” Además el actual Real Decreto Ley 15/2020, lo indica claro, en lo que se refiere a las medidas de carácter preferente del teletrabajo y medidas conciliatorias (reducción de jornada, adaptación horaria, etc…) continuarán estando en vigor hasta tres meses después de finalizado el estado de alarma.
En un momento tan excepcional como el presente, todas las personas ven amenazado lo más importante en su existencia: su salud, su vida, su subsistencia económica, su familia, su estilo de vida, etc. Por ello, a la readaptación física del entorno de trabajo inicial hemos de añadir los factores limitantes del entorno de trabajo, que si no se gestionan convenientemente pueden derivar en problemas de orden psicosocial con patologías físicas asociadas
- La novedad del entorno de trabajo
- La situación familiar con enfermos, personas que se están recuperando COVID, hijos o personas mayores a cargo en el hogar
- El aislamiento social, el miedo a salir, el dolor emocional…en confinamiento
- Los miedos e incertidumbres laborales y socioeconómicos que amenazan. Situación económica y laboral compleja
- Los espacios y los recursos compartidos ante las mismas circunstancias en los domicilios
Situaciones que hacen que en estos momentos los riesgos psicosociales se acentúen.
El Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo ha material de interés para la gestión del riesgo psicosocial y ergonómico del trabajo a distancia:
Riesgos psicosociales y trabajo a distancia por Covid-19. Recomendaciones para el empleador 0
Riesgos psicosociales y trabajo a distancia por Covid-19 (ESQUEMA)
- Orientaciones ergonómicas para trabajos a distancia con ordenador debido al COVID-19
- 4 consejos de gestión psicosocial en el trabajo a distancia debido al COVID-19–
- 4 consejos para mantener el bienestar emocional en el trabajo a distancia debido al COVID-19–
A partir de este material, he recopilado 10 RECOMENDACIONES PARA AYUDARTE A TI EMPRESARIO EN LA ORGANIZACIÓN DEL TRABAJO Y EN EL CUIDADO DE LA SALUD DE TUS TRABAJADORES EN SITUACION DE TRABAJO A DISTANCIA
- Infórmate de los recursos técnicos con que cuenta cada trabajador para el desempeño de su trabajo y en la medida de tus posibilidades provéele de los que necesite. Con la reactivación de la actividad económica, la capacidad de respuesta es mayor
- Establece canales de comunicación individualizados y/o de grupo: correo electrónico, redes sociales, videoconferencia, teléfono… y mantenlos activos
- Garantiza una carga de trabajo equilibrada a cada empleado y asigna de forma concreta las tareas y cometidos. Para ello establece objetivos y plazos razonables y hazlo con cierta antelación para que el trabajador pueda organizar su trabajo para amoldarse a sus nuevas circunstancias. Prioriza las tareas y relega a otro momento las menos necesarias. Haz seguimiento
- Establece un programa de contacto profesional y personal con los trabajadores cada varios días; infórmate de cómo les va, cuál es su situación personal y profesional, motívales y anímalos. ¡Que no se sientan solos!
- Permanece siempre a disposición para resolver cualquier problema, duda o inquietud de los trabajadores.
- Reconoce y pondera el trabajo realizado, especialmente en estas circunstancias tan difíciles. Proporciónales “feedback” regular de su trabajo.
- Mantén informados a los trabajadores:
- De los procedimientos de trabajo que se mantienen y las modificaciones sobre la forma habitual de trabajo.
- Del plan y calendario, de contactos telefónicos, chats, videoconferencias, …
- De la situación global de la empresa; nuevos horarios, turnos de trabajo, teléfonos de asistencia, servicios prestados, etc.
- Facilita a los trabajadores recomendaciones que establezcan las instituciones oficiales. sobre diseño del puesto de trabajo, iluminación, posturas de trabajo (aquí), medidas para la prevención de la fatiga mental, gestión del estrés, hábitos de sueño (aquí), ejercicio físico en casa, alimentación, etc
- Dosifica la información; existe un exceso de información al que el trabajador está también expuesto.
- Responde con claridad y sinceridad a cualquier duda que tengan los trabajadores sobre estas cuestiones.
- Establece un canal específico para que los trabajadores te informen de la existencia de algún riesgo o situación especial que les afecte durante estas circunstancias. Es deseable en esta situación disponer o facilitar un servicio de apoyo psicológico, si fuera posible, inscrito en el programa de ayuda al empleado.
Ante un futuro lleno de interrogantes, algo que nos está demostrando la crisis del coronavirus, es que el teletrabajo funciona. Y, tal y como indica una encuesta de la firma Colliers”, la pandemia podría ser un catalizador para que este modelo de trabajo deje de ser la excepción para convertirse en la nueva norma” .Y es que no lo olvidemos, la tecnología es un facilitador para incrementar la productividad y la eficiencia en el entorno laboral, si bien nos queda mucho por avanzar a nivel organizacional lo que pasa por su regulación legal en el ordenamiento laboral y el análisis de factores de riesgos con garantías de actuación preventiva.
Redactado por Susana Romero