Personajes que marcaron la historia de la prevención de riesgos laborales: Jerónimo de Ayanz

Jerónimo de Ayanz y Beaumont (1553 – 1613) “el Da Vinci español” que inventó la máquina de vapor en 1606.

Jerónimo de Ayanz y Beaumont. Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología, Eulogia Merle.

Ayanz inventó muchas cosas: una bomba para desaguar barcos; un precedente del submarino; una brújula que establecía la declinación magnética; un horno para destilar agua marina a bordo de los barcos; balanzas capaces de pesar una pata de mosca; piedras de forma cónica para moler; molinos de rodillos metálicos ; bombas para el riego; la estructura en arco para las presas de los embalses; un mecanismo de transformación del movimiento que permite medir el denominado «par motor», es decir, la eficiencia técnica, algo que sólo siglo y pico después iba a volver a abordarse.

Hasta 48 inventos le reconocía en 1606 el «privilegio de invención», como se llamaba entonces a las patentes, firmado por Felipe III.

Uno de los inventos más llamativos fue el de un traje de buceo. La primera inmersión de un buzo documentada ocurrió en el río Pisuerga frente al palacio de la Ribera, en Valladolid, y el propio Felipe III asistió al acontecimiento desde su galera, junto con miembros de la corte.

Desde 1608 se había dedicado a la explotación privada de un yacimiento de oro cerca de El Escorial y a la recuperación de las minas de Guadalcanal, las mismas donde había aplicado por primera vez en el mundo una máquina de vapor.

¿Y porqué lo hemos elegido como uno de los personajes que también han marcado la historia de la prevención de riesgos laborales? Por su invento y aportación a los trabajadores de las minas…

Las minas de la época tenían dos problemas serios, la acumulación de agua en las galerías y la contaminación del aire en su interior.

Para el problema del agua en las galerías, inicialmente, Ayanz inventó un sistema de desagüe mediante un sifón con intercambiador, haciendo que el agua contaminada de la parte superior procedente del lavado del mineral proporcionara suficiente energía para elevar el agua acumulada en las galerías.

Este invento supuso la primera aplicación práctica del principio de la presión atmosférica, principio que no iba a ser determinado científicamente hasta medio siglo después.

Con respecto a la contaminación del aire en su interior y a las altas temperaturas que había en las que tenían que trabajar en las minas, Jerónimo ideó un sistema de eyección de vapor que convertía el aire en aire notablemente enfriado mediante una red de tubos. De esta manera hacía mucho más habitable el ambiente de trabajo de los mineros, así que Ayanz inventó el primer «aire acondicionado» que conocemos actualmente.

La fuerza del vapor de agua era conocida desde hacía muchísimo tiempo. El primero en utilizarla fue Herón de Alejandría, en el siglo I. Mucho después, en el siglo XII, consta que en la catedral de Reims había un órgano que funcionaba con vapor.

Ayanz enfermó de repente gravemente (y murió en Madrid en 1613, sus restos fueron trasladados a Murcia, ciudad que había gobernado, primero al convento de San Antonio de Padua y posteriormente a la Catedral.

Sin embargo la muerte le llegó en 23 de marzo de 1613, después de una penosa enfermedad. Fue otro español, adelantado a su tiempo.

Fuente:

https://es.wikipedia.org/wiki/Jer%C3%B3nimo_de_Ayanz_y_Beaumont

 

Redactado por Ana Serrano Soriano

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